«Mi equipo luchará hasta el final»

Aira ha visto en el equipo de la Nueva Condomina la oportunidad de que su trayectoria como entrenador dé un salto de calidad hacia el fútbol profesional. El técnico no dudó al recibir la llamada de Chuti Molina para interesarse por sus servicios y aceptó de inmediato la oferta del conjunto grana porque «venir a Murcia supone crecer en lo personal y dar un paso muy importante. Es un reto muy bonito que estoy dispuesto a sacar adelante». El único 'pero' estuvo en la situación económica por la que atraviesa el club, pero desde el primer momento, reconoce que le dieron la palabra de que el Real Murcia seguiría jugando en Segunda.

Menos de 100.000 euros

Tampoco se interesó por el dinero que iba a cobrar, inferior a los 100.000 euros, y sí por lo que podía reportarle el reto de dirigir al equipo que más temporadas ha jugado en Segunda. En esta línea, afirmó que «ni de jugador ni de entrenador me he dejado llevar por el tema económico, siempre he mirado más el crecimiento deportivo. No tengo ninguna duda de que el Real Murcia va a suponer un crecimiento en mi carrera».

El de Ponferrada ve lógico que para la afición no sea el técnico esperado para ilusionar tanto como podían haberlo hecho otros nombres como el de Sergio Lobera, Sergi Barjuan, Toril i Juan Ignacio Martínez. A los indecisos con su contratación les pidió «que confíen porque todos tenemos una primera vez para todo. Antes de venir aquí había entrenado en Segunda B y en Tercera. El primer año no conseguí los objetivos, el segundo sí, y el año pasado que entrené en Segunda B por primera vez con el Ferrol, quedé segundo por detrás del Racing de Santander».

Promete trabajo, un equipo competitivo que luche hasta el final y que enorgullezca a los murcianistas. «Hay que ganarse a la gente con trabajo, con dedicación y después lógicamente sabemos que la pelotita tiene que entrar, que es lo más importante». A Aira le gusta que su equipo sea protagonista sobre el césped, que domine la posesión para hacer daño al rival y que genere desajustes en las debilidades del equipo rival. No entiende de objetivos, ni de 'playoff' ni de ascenso, solo piensa en el día a día. «Lo más importante es que el equipo sea competitivo y si el año pasado el equipo llegó hasta donde llegó fue por plantearse las cosas semana a semana».

Tiene una actitud positiva para afrontar las dificultades y no ve este nuevo reto como una presión en sí de tener que igualar lo logrado la temporada pasada. Siente más responsabilidad «porque he llegado a un club con mucha historia, como es el Real Murcia, que es centenario, con una de las ciudades más grandes de España y una gran afición detrás». Con la idea de crecer y de hacer crecer al Real Murcia al mismo tiempo confía en poder obtener un buen resultado. «Presión hay en todos los trabajos del mundo uno siempre quiere hacerlo bien y no quiere fallar, siempre quiere ser mejor cada día y responder a quién ha apostado por ti».

Este fichaje es una clara apuesta de Chuti Molina. El director deportivo ha revisado informes del último año de Aira en Ferrol para conocer su metodología de trabajo y su dirección del vestuario. La amistad de Aira y Molina viene de 2007, cuando el nuevo técnico grana jugaba en el Lugo y el albaceteño llegaba a Vigo para confeccionar la plantilla del Celta. Desde entonces han estado en contacto.

«Tengo total confianza en él porque en la situación actual que tiene el Real Murcia tenemos que hacer este tipo de apuestas. Tengo muy claro que la profesionalidad que tiene Aira es máxima, como todos los que hay. Sé que está tan preparado como Julio Velázquez, que se acaba de marchar, o como cualquier otro entrenador que ha habido aquí», explicó Chuti, quien añadió que el club va a continuar contratando jugadores de Segunda B, como hizo el año pasado con Tete, que tan buen rendimiento dio en la primera fase del campeonato. En el Real Murcia no hay dinero para jugadores de superior categoría y necesita aprovechar la ambición y el compromiso de futbolistas con ganas de demostrar que valen para el fútbol profesional. «El Murcia tiene que estar a la vanguardia de apostar por jugadores en esta línea y en entrenadores porque sino nunca tendremos la posibilidad de dar ese salto».

Óscar Sánchez y Acciari

Aira no viene solo, llega acompañado del preparador físico, Javier Reyes, con el que coincidió cuando era jugador del Polideportivo Ejido. También ha trabajado en el Deportivo y el Athletic, en las etapas en las que Joaquín Caparrós entrenó a ambos clubes. El club se reserva la elección del segundo entrenador para más adelante, dijo Chuti Molina, quien dejó entrever que Óscar Sánchez podría ser el hombre elegido para ese puesto si finalmente se decide que no continúe como jugador. El director deportivo descartó que ese puesto pueda ser para Acciari porque «está muy en forma y tiene cuerda para rato. No lo retiréis así como así porque va a pedir tres años, seguro y viene de jugar 30 partidos de los cuales ha sido titular en 23».