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El entrenador del Murcia, José Manuel Aira, en Cobatillas.
Tras la guerra, el fútbol

Tras la guerra, el fútbol

Un Murcia cargado de rabia por el descenso arranca el curso en casa ante el filial del Celta, después de ganar la semana pasada en Ferrol

José Otón

Sábado, 6 de septiembre 2014, 22:38

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Los once jugadores que hoy vestirán la camiseta del Real Murcia frente al Celta B, más los cinco que estarán en el banquillo, los que se queden en la grada, más su entrenador y el cuerpo técnico al completo, no tienen la culpa de lo que le ha pasado al equipo grana este verano. Algunos, incluso, son las primeras víctimas del descenso y no han tenido nada que ver en la guerra entre Tebas y Samper, que ha acabado con el Murcia en Segunda B y con una desbandada que hará que hoy se vea a un equipo prácticamente nuevo en la Nueva Condomina. Tras el primer triunfo fuera, los granas arrancan en casa en una temporada difícil y cargada de dudas.

Los aficionados del Real Murcia han declarado a lo largo de la semana que se van a mostrar muy duros con Jesús Samper en el choque de hoy, que van a protestar masivamente contra la propiedad del Real Murcia coincidiendo con el comienzo del choque de esta tarde y que los políticos también van a ser el blanco de sus iras. No van a dejar títere con cabeza. La dureza va a ser su respuesta a una serie de torpezas que han llevado al Real Murcia a Segunda B, que le han conducido de tener que debutar hace dos semanas contra el Lugo en la Nueva Condomina a tener que presentarse esta tarde en casa frente al Celta B y mirando de reojo lo que hagan equipos como el Lealtad, el Marino de Luanco y el Somozas, conjuntos que pocos aficionados acertarían a colocar en el mapa de una España en la que el Real Murcia ha sido protagonista para lo malo durante este verano.

Pero al mismo tiempo la grada -ya lo ha deslizado la federación de peñas y es un sentir que se palpa en el ambiente grana- va a estar agradecida a los componentes del nuevo Real Murcia, hecho a contrarreloj pero integrado por jugadores que siguen viendo en Murcia un trampolín para realzar sus carreras. Del nuevo equipo grana apenas nadie tiene conciencia, pero apunta a un conjunto bien armado y concienzudamante diseñado, aunque le faltan algunas piezas importantes como algún central más o un extremo derecho. El nuevo Murcia es un equipo en formación, en el que jugadores que tienen que llevar el peso esta temporada vienen de estar prácticamente parados. Además, aún no se va a poder disfrutar al cien por cien de futbolistas como Garmendia, Javi Flores, David Castro y Gerard Oliva, entre otros, que saben jugar a este deporte que mueve tantas pasiones, que provoca las lágrimas y que se llama fútbol, pero están recién llegados.

El bloque de Ferrol

El técnico Aira, pese a que tirará finalmente de algunos de los jugadores citados anteriormente aunque no estén a tope físicamente, afrontará el choque con el grueso de la artillería que ganó en Ferrol. Sobregrau, Armando y Oliva podrán demostrar que en una semana han mejorado sus prestaciones lo suficiente para ser titulares. Además, Fernando pide a gritos otra oportunidad en la portería tras ganar su equipo en el estreno, mientras que José Martínez y Pumar parecen inamovibles en las bandas. Atrás podría aparecer como central un Víctor Ruiz que, como Jairo y Armando, llegó a Murcia hace unos días con la pretemporada hecha, aunque en otro equipo.

El entrenador leonés también puede necesitar a David Castro, ante la ausencia de centrales, a Acciari intimidando en el centro del campo, a Carrillo peleando arriba y a Rubén Sánchez brillando en la banda. Este último es un jugador que tuvo una oferta de dos temporadas para irse al Alcorcón y que no quiso marcharse. Por él pasan muchas de las esperanzas de ascenso grana.

La incógnita radica en saber qué papel tendrá un canterano como Arturo, que apunta a estrella y que marcó en Ferrol, en un Real Murcia que tras la marcha de Kike y Eddy se ha quedado huérfano de referentes de la cantera sobre el campo. Hoy, aunque están todos convocados, solo 16 se vestirán de corto en una lista de la que se quedarán fuera dos jugadores de la primera plantilla y algún canterano que tiene depositada su fe en brillar con el Real Murcia.

Si Aira apuesta por el 4-2-3-1, no es descartable un doble pivote con Acciari y Armando y una línea de tres por delante con Albiol, Garmendia o Xavi Marqués y Rubén Sánchez. Además, Jairo podría tener ya sus primeros minutos como grana. Y solo habrá un jugador arriba: Carrillo u Oliva. Enfrente estará un equipo cargado de desparpajo, que sabe manejar el balón y que tiene extremos incisivos, pero que se duerme atrás como todos los filiales que se precien de serlo. Sacar provecho de ello y la rabia contenida serán las armas del Murcia.

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