Satrústegui, otro muro para Aira

El equipo navarro volvió a Pamplona con un 7-1 en contra, pero Satrústegui, el nuevo fichaje del Real Murcia, había cumplido uno de sus sueños: debutar con la camiseta del primer equipo de sus ciudad.

Tres años más tarde ha dado con sus huesos en la Nueva Condomina, tras una ajetreada trayectoria futbolistica. En la campaña 2012-2013 fue cedido al Numancia en busca de minutos para formarse, aunque se encontró con una lesión de rodilla que le trastocó su carrera. En febrero de 2013, una torsión en un entrenamiento en la ciudad deportiva del Sevilla, previo a un choque frente al Recreativo, le obligó a quedarse fuera de los terrenos de juego durante ocho meses, ya que su diagnóstico fue uno de los peores para un futbolista: rotura del ligamento cruzado anterior de la pierna derecha. Había jugado 13 partidos como titular indiscutible, pero se vio abocado al ostracismo. El jugador cedido por Osasuna volvió a casa para militar en la campaña 2013-2014 en el equipo navarro, aunque Javi Gracia no le dio demasiadas oportunidades. Satrústegui, no obstante, volvió a aparecer en Copa del Rey frente al Real Madrid.

El nuevo jugador del Real Murcia llega al equipo grana tras entrenar con normalidad durante la pasada campaña, pero falto de partidos. Osasuna le ofreció renovar a la baja, pero el central de 23 años de edad ha preferido buscarse la vida lejos de su ciudad natal.

Llega a Murcia para apuntalar la defensa grana y para volver a sentirse futbolista. Y a pesar de haber sido casi siempre un lateral zurdo, quiere asumir el reto de jugar de central y formar, junto a David Prieto, la mejor pareja de defensas de la categoría. El nuevo pupilo de José Manuel Aira da sentido a una línea defensiva que necesitaba más piezas, más tras la derrota del domingo ante el Celta B en la que quedó reflejado que el nuevo Real Murcia sabe atacar pero es muy ingenuo a la hora de defender. Demostró, con una jugada infantil que le costó al Real Murcia encajar un gol, que necesita jugadores con experiencia. Eneko Satrústegui tendrá, como Javi Flores y Joseba Garmendia la oportunidad de demostrar en Murcia que quiere seguir siendo un jugador de superior categoría.

Con la incorporación del defensa navarro, José Manuel Aira cuenta con una plantilla con 15 fichas senior y cuatro sub-23, con lo que aún podría hacer tres incorporaciones más. La de un jugador profesional y otros dos menores de 23 años. Pero la intención del Real Murcia es otra, ya que, salvo que aparezca en el mercado un 'chollo', solo quiere incorporar un delantero antes del próximo mercado invernal. El jugador que falta podría ser un futbolista de banda derecha, posición en la que el entrenador del Real Murcia solo cuenta con Miguel Albiol, aunque Rubén Sánchez y Jairo son polivalentes y pueden jugar en las dos bandas.

Villar aprieta al Murcia

La Federación Española de Fútbol no quiere dar ni un respiro al Real Murcia. Tras no autorizar hace unas semanas el aplazamiento de la segunda jornada de Liga ante el Racing de Ferrol, a pesar de que el equipo grana no contaba con jugadores suficientes, ahora quiere que dispute lo antes posible el choque contra el Logroñés, correspondiente a la primera jornada de Liga y que sí fue aplazado tras confirmarse oficialmente el descenso grana a Segunda B a mediados de agosto. Lo curioso es que la propia Federación instó al Murcia a jugar el partido ante los riojanos el 10 de septiembre, o sea, mañana, sin darse cuenta de que era la fecha designada para la celebración de la segunda ronda de la Copa del Rey en la que el equipo grana se tiene que enfrentar al Sabadell.

El Murcia está esperando ahora que la Federación le notifique si el encuentro ante el equipo riojano debe disputarse el 17 de septiembre. Lo que tampoco es capaz de resolver el organismo que preside Villar es si el Real Murcia, si elimina al Sabadell mañana, seguirá siendo considerado en Copa un equipo de Segunda o de Segunda B.

Si elimina a los catalanes y se le considera de Segunda B, solo tendría por delante una eliminatoria más ante otro equipo de la misma categoría para entrar en el bombo teniendo derecho a enfrentarse en la cuarta ronda a un rival de 'Champions'. Una situación similar a la de 2010, cuando el Murcia de Iñaki Alonso se enfrentó al Real Madrid de Mourinho en una eliminatoria que dejó un millón de euros en las arcas del club. De repetirse la situación, la inyección económica sería importante para un equipo que necesita ingresos para paliar sus deudas. El Mirandés, que ocupó la plaza del Real Murcia en Segunda, es considerado de Segunda B en la Copa, y el equipo murcianista de Segunda División.