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Real Murcia

fútbol 2ªb

Premio a la ambición

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Gerard Olvia conduce el balón seguido por dos rivales del Astorga. / Leonoticias.com

  • Tras la expulsión de Acciari, el Murcia fue a por el Astorga y encontró la recompensa con los goles de Carlos Ávarez e Isi

El Real Murcia logró tres puntos de oro en su visita a Astorga y mete presión a un Oviedo que se mide al Racing de Ferrol, equipo de 'playoff' que visita el Tartiere en esta jornada. El equipo de Aira fue un equipo vulgar hasta la expulsión de Acciari en la segunda parte, en la que el equipo grana, con Javi Flores al mando, tomó las riendas del encuentro y se aprovechó de que desde hace semanas cuenta en su plantilla con un delantero goleador que solo necesita un balón suelto en el área para conducir a su equipo a la victoria. El segundo tanto de Carlos Álvarez en los minutos finales de un encuentro (hizo lo mismo ante el Langreo), sirve al Real Murcia para espantar los fantasmas y volver a mirar hacia el liderato de la clasificación tras el tropiezo de la semana pasada.

La primera parte del Real Murcia fue mala. Aunque el equipo de José Manuel Aira arrancó intentando hacerse con el partido, no consiguió intimidar al equipo leonés. David Prieto, ante la presión de los correosos delanteros locales, optaba por buscar desplazamientos en largo. Javi Flores, que volvía a la titularidad tras varias semanas lesionado, demostraba porqué es insustituible en el equipo grana. Se responsabilizó del Real Murcia en ataque, disparo desde lejos y dibujó la ocasión más peligrosa de los granas sacando una falta cerca del borde del área, de forma astuta y buscando a Gerard Oliva. La jugada estaba ensayada pero el delantero tarraconés, que pudo encarar la meta defendida por Javi Díez en solitario, se durmió y dejó que los defensores locales lo encimaran.

Pero con el paso de los minutos el Astorga le fue perdiendo el miedo a los murcianos. David Bandera, el extremo del Astorga, comenzó a incordiar a la defensa grana por la derecha y por la izquierda. Incluso fue capaz de provocar la tarjeta amarilla de Acciari. Ésta, sumada a la que vio Sobregrau minutos más tarde, hipotecaba a los dos jugadores más expeditivos del equipo grana para la segunda parte. A los puntos el equipo de Pepe Calvo mereció más que el Real Murcia al término de los primeros cuarenta y cinco minutos. Sobre todo por que, además de un remate de David Bandera que se fue al lateral de la red, la sensación de peligro creada por el equipo verde fue mayor.

En el primer tiempo, a excepción de Sobregrau, Acciari y Javi Flores, pocos jugadores del equipo grana llegaron al aprobado. Incluso alguno como Jairo y Rubén Sánchez ni aparecieron. Y Pumar, al que Borja Martín, el delantero centro que ha hecho del Astorga un equipo goleador, dejó sentado en la banda en la jugada que le costó la tarjeta amarilla a Acciari. En la segunda mitad el equipo leonés salió embalado y al minuto de juego un remate de Porfirio no acabó en el fondo de las mallas de la portería de Iván Crespo porque el portero grana estuvo atento y detuvo en dos tiempos. Solo Javi Flores y su calidad mantenía a su equipo en pie. Hasta que llegaron las expulsiones que cambiaron el choque.

La ingenuidad de Acciari

Primero la de Diego Peláez, el defensa del Astorga, que tiró una patada a Jairo sin balón. El colegiado, valiente, lo expulsó. Con superioridad grana apenas hubo fútbol. Hasta que Acciari, que arrastraba una tarjeta amarilla desde el primer tiempo, cometió una imprudencia poniendo la mano sobre Cristian, defensa local, que simuló una agresión. El colegiado, al que se le había complicado el partido, compensó mandando al argentino a la calle. Los dos equipos tenían que afrontar los últimos veinticinco minutos con diez jugadores.

Y con un retoque táctico de Aira, el Real Murcia se hizo con el encuentro. Javi Flores abandonó su posición en la mediapunta y bajó al centro del campo. Los granas comenzaron a cocinar su victoria. Se fue a por el Astorga, que se encerró atrás y comenzó a perder tiempo. Carlos Álvarez e Isi saltaron al terreno de juego, dos cambios que resultaron fundamentales para la victoria grana. De hecho, en el tramo final del encuentro, una jugada iniciada por Jairo y continuada por el canterano ciezano acabó con el remate oportunista y de delantero centro con intucición de Álvarez. Otro gol del asturiano sobre la bocina.

El equipo grana agarraba tres puntos valiosos que le sirven para meterle presión al Oviedo. La gran jugada de Arturo, previa al 0-2 obra de Isi, fue la sentencia de un choque en el que el Real Murcia solo se mostró como un equipo grande en los últimos veinte minutos, pero que le sirve para arrancar una victoria revitalizante que enjuga el mal sabor dejado por la derrota de la pasada semana ante el Coruxo.