Aira se cuela en la 'lista VIP' de Jesús Samper

Esto es algo de lo que muy pocos técnicos que han pasado por el Real Murcia en las últimas 14 temporadas pueden presumir. Desde la llegada de Jesús Samper a la presidencia del Real Murcia, allá por el año 2001, el club no se ha caracterizado por contar con proyectos a largo plazo. El máximo accionista de la entidad siempre ha exigido resultados inmediatos y no ha perdonado a quien no los ha cumplido o a aquellos técnicos que se han desviado de la ruta marcada.

De los 17 entrenadores que ha tenido Samper en el Real Murcia, tan solo siete figuran en la lista de importantes para el empresario madrileño, que en su día tomó la decisión de renovarlos y de confiarles la planificación de la siguiente temporada. El último es José Manuel Aira que, con 38 partidos de liga a sus espaldas, podría aproximarse al técnico que más ha durado en el Real Murcia desde que Samper es presidente: Iñaki Alonso. Eso, siempre y cuando logre terminar el campeonato que está por empezar. «Valoro mucho la confianza que están depositando en todo el cuerpo técnico e intentaremos, a base de trabajo y cargarnos de responsabilidad, poder devolver esa confianza y cumplir los objetivos», reconoció Aira a 'La Verdad', conocedor de la exigencia máxima con la que afronta la presente temporada, en la que tan solo vale ascender.

El primer entrenador que gozó de la confianza de Samper para después de una temporada poder preparar la siguiente fue David Vidal, entre 2001 y 2003. El carácter del técnico gallego sigue siendo recordado por todo el murcianismo, que no olvida la fuerza y la intensidad con la que vivía los partidos y que le sirvió al Real Murcia para salvarse en las 17 jornadas que entrenó al equipo en la primera temporada, y para ascenderlo a Primera en la segunda campaña. Un logro que no le valió, sin embargo, para seguir al frente del banquillo, ya que Samper decidió que su labor debía tener lugar en los despachos como director deportivo en los dos años que le restaban de contrato y que finalmente no cumplió. Dos años tuvieron que pasar para que el máximo accionista volviese a renovar a un entrenador. Fue con el aguileño Juan Casuco, que tomó las riendas del banquillo en la temporada 2004-2005, en descenso, y lo salvó con nueve puntos de ventaja. Sin embargo, tras un empate contra el Ciudad de Murcia en la jornada 19 tras una mala racha cuando el equipo era noveno, Samper vio razones suficientes para quitarlo de en medio.

Iñaki Alonso, a la cabeza

El que está a la cabeza de la lista de entrenadores con los que ha contado Samper no es otro que Iñaki Alonso, actual entrenador del Compostela, donde también va a afrontar su segunda temporada consecutiva. El de Durango estuvo un total de 90 partidos al frente del banquillo grana, entre los 80 duelos en competición regular -los 38 de Segunda B y los 42 de Segunda-, más 10 de otras competiciones o fases -cuatro de promoción de ascenso y seis de Copa del Rey-. Pese a que logró los dos objetivos que estableció el presidente, primero el ascenso y después la permanencia, a Samper se le atragantó su sistema de trabajo y prefirió no contar con él.

Peor suerte que Iñaki Alonso tuvo Lucas Alcaraz, que también consiguió un ascenso, en este caso, a Primera en 2007, tras una espectacular temporada en la que aventajó en 13 puntos al cuarto clasificado, en una época en que ascendían a Primera los tres primeros. Pero el granadino fue incapaz de encauzar la siguiente campaña en la máxima categoría del fútbol español y a las 26 jornadas Samper decidió despedirlo para traer a Javier Clemente.

El técnico vasco, que cogió al equipo a seis puntos de la salvación, lo terminó dejando descendido a trece del principal objetivo. Ese mal bagaje no privó a Samper de ofrecerle la continuidad en Segunda, lo que a la postre fue una mala decisión al tener que prescindir de sus servicios cuando el equipo estaba en descenso, camino de Segunda B. Al rescate llegó Campos, que salvó al equipo y gozó de todo el verano para elaborar un proyecto que ilusionase al murcianismo. Una pretensión que no logró al ser destituido a las diez jornadas, en una temporada que terminaría con el equipo en Segunda B.

Fue entonces cuando apareció Iñaki Alonso para devolverlo al fútbol profesional en su primer año en el banquillo. Algo que no ha logrado Aira esta temporada, pero que tiene la suerte de disponer de una segunda oportunidad para lograrlo y ganarse su continuidad al frente del club un año más. Siempre y cuando Samper no cambie de proyecto ni de opinión.