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Acciari, con sus jugadores, en un entrenamiento en Cobatillas.
La receta para tomar Toledo
Fútbol | Real Murcia

La receta para tomar Toledo

Acciari pide intensidad en defensa, ganas en el centro del campo y entrega arriba para salir victorioso del primer partido de una promoción de ascenso a Segunda vital para el futuro del Real Murcia

JOSÉ OTÓN

Sábado, 21 de mayo 2016, 22:34

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El Real Murcia afronta desde esta tarde un 'playoff' clave para su futuro. No es la única vía de escape del equipo grana, pero volver al fútbol profesional le reportaría de una tacada 7 millones de euros por el contrato televisivo, gracias a su historia en la categoría, más la publicidad y un mayor número de abonados. Dar el salto pondría de nuevo al Murcia en el mapa, tras dos años en el pozo. Es el sueño de Martínez Abarca y su directiva, la que se lo jugó todo por salvar al club, y también la de miles de murcianistas acostumbrados a sufrir con un equipo que da más sustos que alegrías.

No es lo mismo ver en la Nueva Condomina al Tropezón y al San Roque de Lepe, que al Zaragoza, el Mallorca y el Córdoba, por ejemplo. Independientemente de la llegada de futuros inversores y de la esperada respuesta de los marea grana en la ampliación de capital que arrancó a mitad de la semana pasada, el equipo de Acciari tiene en la mano sacar al club de la UCI, y pasar a la historia por haber logrado un ascenso vital, para el que tendrán que lidiar seis batallas.

La primera será frente a un rival que no tiene la misma prisa que los granas. El Toledo es un histórico, se fundó en 1928, pero no tiene tanta ansiedad. No está en la misma situación que el equipo grana, el Racing de Santander y el Cádiz, por ejemplo, auténticos históricos en apuros. Solo ha estado en su larga historia siete veces en Segunda y ninguna en Primera, siendo su hábitat natural la Segunda B (38 presencias) y la Tercera.

En el fútbol español solo se le conoce por echar fuera de la Copa del Rey al Real Madrid en el año 2000. Es más, su objetivo esta temporada era estar de mitad de la tabla para arriba y el 'playoff' ha sido un premio. Su táctica, por mucho que Onésimo ha predicado que a su equipo le gusta tener el balón y ser protagonista, será esperar a que se equivoque el Murcia y aprovechar el paso en falso de su rival. Las verá venir y querrá jugársela en la Nueva Condomina, sin descartar resolver en la tanda de penaltis.

El Real Murcia tiene que poner los cinco sentidos en el partido de esta tarde. El principal objetivo es no volver a cometer los mismos errores defensivos que le arrastraron desde lo alto de la tabla al segundo puesto y casi al tercero. Encajó once goles en los últimos ocho partidos y la defensa, que entonces parecía de acero, pasó a ser de cartón-piedra en los últimos dos meses de la Liga. Por eso Acciari, más que en enseñar a sus jugadores nuevas tácticas, ha destinado sus dos primeras semanas de entrenamiento a que sus pupilos recuperen la fe y la autoestima. Trabaja para que escondan el miedo y la ansiedad. El Real Murcia tiene que jugar un partido inteligente, no se puede volver loco e irse al ataque, pero debe aprovechar sus armas para marcar algún gol.

Apoyo y experiencia

Además el equipo grana contará con el apoyo de 350 fieles que han decidido no dejar solo a un equipo que necesita un empujón para volver a la Nueva Condomina el próximo domingo a sellar el pase a la segunda ronda. Como toda la temporada, y en todos los campos, el color grana relucirá en uno de los fondos del Salto del Caballo. También contarán los murcianistas con un equipo más experimentado que el Toledo en este tipo de partidos. En las filas granas hay 13 jugadores que disputaron 'playoff' de ascenso el año pasado y que saben que el de esta tarde no es un partido como cualquiera de los 38 que han disputado a lo largo de esta Liga. Ocho de estos futbolistas (Fernando, Sobregrau, Satrústegui, Pumar, Armando, Arturo, Isi y Carlos Álvarez) vieron como el año pasado un cuarto, el Hércules, se cargó al equipo grana a las primeras de cambio, después del empate a uno de la ida en el Rico Pérez.

Mas allá del respeto que produce un equipo que ha acabado cuarto en un grupo igualado como el II, el Murcia está obligado a demostrar que tiene más argumentos para pasar la eliminatoria. El Toledo tiene a Toni Doblas en la portería, un jugador que vivió sus mejores años defendiendo a un Betis que ganó una Copa y se clasificó para la 'Champions. También a Juan Esnáider, el hijo del exjugador grana y actual técnico del Getafe, en la parte de arriba. Pero el Murcia tiene más dinamita. A pesar de que Azkorra no ha llegado al primer envite del 'playoff', Acciari puede contener a su rival con Armando y Guilló en el centro del campo y buscar el gol con Fran Moreno y Carlos Álvarez arriba, apoyados por jugadores como Isi, Germán y Sergio García en las bandas. El Murcia tiene más potencial y más fútbol, aunque su mayor enemigo será la presión por ascender. Si el Murcia es en el Salto del Caballo el Murcia líder que sacó partido a todas sus virtudes, la eliminatoria será grana. Si es en Toledo el equipo impreciso de las últimas semanas de Aira, toca resignarse y sufrir hasta el final.

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