Secciones
Servicios
Destacamos
José Otón
Domingo, 21 de mayo 2017, 23:05
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
No es fácil jugar un 'playoff' y menos arrancarlo de forma tan brillante. Después de tres años de sinsabores y sueños rotos a las primeras de cambio, el Real Murcia va a poder afrontar la vuelta de una eliminatoria de 'playoff' de ascenso a Segunda con ilusión y esperanza de pasar a la segunda ronda. Aunque el Murcia tiene experiencias de todos los sabores en su historia, desde que se trasladó a la Nueva Condomina casi siempre ha fracasado cuando se ha tratado de jugar una fase de ascenso. Solo pudo sonreír cuando el Murcia de Iñaki consiguió tumbar al Lugo en 2011. Pero este año todo pinta de forma diferente. Tomando como referencia las tres últimas participaciones, los granas solo marcaron 3 goles en un total de 6 partidos, divididos en tres eliminatorias. Nada que ver con esta fase que arrancó el sábado en Pasarón, donde el Murcia de Mir marcó tres goles 3 en el primer acto, los mismos que sumando los 450 minutos de juego de sus tres últimos años de 'playoff'. Esta vez, la historia parece enderezarse.
Temporada 2013-14
El Murcia de Velázquez fue eliminado en la primera ronda de la eliminatoria de ascenso a Primera ante el Córdoba. Tras el 0-0 del partido de ida, los granas cayeron en la Nueva Condomina 1-2, ante 16.794 espectadores.
Temporada 2014-15
El Murcia de Aira, que llegaba como segundo, volvió del Rico Pérez de Alicante con un valioso empate a uno en la ida ante el Hércules, pero cayó en la vuelta con un 0-1 ante el equipo alicantino.
Temporada 2015-16
El Murcia llegó al 'playoff' tras perder el liderato en la liga regular. Con Acciari en el banquillo, los granas empataron a cero en el Salto del Caballo de Toledo, pero perdieron en la Nueva Condomina en la vuelta 1-2.
La racha negra del Murcia con el 'playoff' jugando en la Nueva Condomina la inauguró el equipo de Julio Velázquez contra el Córdoba al final de la campaña 2013-14. Tras acabar las 42 jornadas de Liga de forma brillante, el club grana, aún con Jesús Samper al mando, debía afrontar dos eliminatorias para llegar a Primera. Tras la ida en el Nuevo Arcángel que acabó con empate a cero, los de Velázquez solo necesitaban ganar por cualquier resultado para meterse en la segunda y definitiva ronda. Pero en la Nueva Condomina, y ante 16.794 espectadores, el Murcia cayó 1-2, castigado por los goles de Pedro y Raúl Bravo. Solo el tanto de Wellington Silva a los nueve minutos de la segunda parte hizo soñar a la afición grana. Aquel choque, disputado el 15 de junio, sirvió como despedida de Kike García, que se marchaba al fútbol inglés, y también de un Julio Velázquez que llevaba días comprometido con el Betis. Fue un día cargado de decepciones y lágrimas por el sueño que se había escapado.
En los dos últimos años el equipo grana se ha enfrentado a una fase de ascenso a Segunda siendo segundo al término de la liga regular, pero con la desconfianza del equipo que no llega en las mejores condiciones y tiene todas las papeletas de irse a la calle a la primeras de cambio.
Este curso, para que el Pontevedra elimine al Murcia el próximo domingo tiene que producirse una debacle colectiva en la Nueva Condomina. El equipo gallego tiene que ganar por un contundente 0-3, ser capaz de igualar la eliminatoria con un 1-3 y forzar la prórroga o ganar el partido con una ventaja mayor de tres goles. Todo esto es algo improbable mirando los números granas de las últimas semanas, sobre todo porque parece complicado que el Real Murcia se quede sin marcar en un partido.
Batiendo marcas
Solo hay que tomar como referencia los últimos cinco encuentros (cuatro de Liga y el estreno en el 'playoff'), en los que el equipo grana está batiendo varios registros. Para empezar, el conjunto de Mir ha marcado dos o más goles en estos cinco últimos encuentros. Ganó 2-0 a El Ejido, 1-3 en el campo del Sanluqueño, 0-4 en la fiesta de La Roda, 3-0 en la despedida de la Liga ante el Extremadura y 1-3 el sábado en Pontevedra. Las cifras goleadoras son altísimas, ya que el Murcia en estos cinco últimos choques marcó un total de 15 goles, a una media de tres por partido. Si a la facilidad para el gol se suma la fortaleza defensiva (solo 2 goles recibidos en 5 partidos), sale un Murcia que huele a ascenso.
Esta potencia goleadora del Murcia contrasta con la vulnerabilidad del Murcia de las dos últimas temporadas en Segunda B. La primera de Aira, la campaña 2014-15, el cuerpo técnico grana tenía excusa: después del descenso administrativo a Segunda B se había conformado una plantilla con retales y sobre la bocina, con jugadores que estaban destinados a quedarse en la lista del paro unos meses. El Murcia, que competió en el grupo I, acabó la liga regular como segundo, a 8 puntos del Oviedo, y dejando dudas tras un final de campaña irregular en el que tuvo que pegar un arreón final para que el Racing de Ferrol no le arrebatara el segundo puesto.
En la eliminatoria de segundo contra cuarto le cayó un débil Hércules, que cedió un empate a uno en la ida en el Rico Pérez. Isi, en el minuto 65, marcó el gol del empate para los granas ante un Hércules que se había adelantado por medio de Javi Casas. En la vuelta, un Murcia conformista al que le valía el empate a cero para pasar, encajó un gol de Fran González en la recta final y se quedó en la calle en la primera batalla.
Una muerte anunciada
El año siguiente la historia se repitió ya que el Murcia, después de ir gran parte de la temporada como primero, cedió el liderato al UCAM a tres jornadas para el final. El mazazo fue tremendo y el conjunto grana, con un Aira que no supo reanimar a su equipo, llegó al 'playoff' de la peor manera posible y además con un Acciari en el banquillo que fue incapaz de reanimar y convencer a un vestuario dolido por el cese del técnico leonés y rebelado contra la directiva. En la primera eliminatoria de ascenso la muerte del Murcia estaba más que cantada. Le tocó el Toledo, equipo que en el choque de vuelta pasó por encima de los granas en la Nueva Condomina gracias a los goles de Maikel y Adrián. Solo el gol de Isi hizo soñar a los granas durante quince minutos. El mes de mayo de 2017 tiene otro color y la sensación del murcianismo, tras el tramo final de la temporada y el arranque del 'playoff', es que este año toca disfrutar.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
¿Cómo llegó una valla de obra a lo alto del Acueducto?
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.